lunes, 11 de abril de 2016

Reflexión sobre el tema

Abuso del poder




Se da en muchos casos y aspectos de nuestras vidas, en la casa, en el colegio, en la universidad, en el trabajo, en muchos campos. Este se aplica cuando hay una extra limitación de funciones; cuando a una empresa llega alguien con poder, y lo usa para amedrentar a sus subalternos por cualquier motivo, o hasta sin motivo.

El abuso de poder se da como ya lo habíamos reseñado en cualquier campo, en el político, social, económico, familiar, en el poder de conocimiento, y hay un campo que parece muy sutil a la hora de hablar de poder, pero aplicable a la sociedad actual. El poder personal, es el magnetismo que tienen ciertas personas de ganarse la confianza de otros, pasa por la confianza y habilidades que tienen algunos individuos para ganar adeptos y cada día hacer que esa confianza crezca y el número de creyentes también. Este último caso aplicable a la religión, pues ciertos “pastores” empiezan solo a predicarle a amigos y terminar con sus grandes iglesias llenas de seguidores por su forma de ser para ganar cada día más y más seguidores.

Abusar del poder es traspasar unas líneas de conducta de un superior, superior solo en el trabajo o en la empresa, pero que èl se siente superior sin serlo, porque ante la mirada de Dios todos somos iguales. Transgredir esas fronteras abusando de una condición de jefe, es violentar la confianza que una empresa tiene en usted, porque muchos abusan del poder sin el conocimiento del verdadero superior en la empresa, llámese gerente, dueño o administrador.

Muchos jefes en las empresas creen que el respeto se impone a través de los gritos, o sobrecargando de trabajo a sus subalternos, no entienden que el respeto no se impone se gana.


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